La rutina de seguir los caminos convencionales, me aburre lo suficiente como para arriesgarme a romper las reglas. En el atado seguir siempre con lo tradicional, tratando de imitar lo mejor posible un insecto tiene su lado positivo. Logramos una imitación realista con materiales simples tradicionales y todos estos materiales están atados al anzuelo. Algo realmente fantástico, mas cuando nos esmeramos en pensar cómo lograr el mayor realismo y lo logramos, pero tiene un cierto límite previamente impuesto, porque nuestras ideas tienen que cumplir algunas imposiciones.
Cuando ato una realista convencional, me doy cuenta que existen diferentes formas de combinar los materiales y de atarlos, para lograr un determinado grado de detalle o un determinado nivel de realismo, por ejemplo... para lograr el híper realismo en patas, atamos pata por pata colocándoles pelos o uñas. Pero seguir siempre con lo mismo sin desviarse de la línea recta, siempre con la misma rutina, termina por cansar.
Es por eso que propongo que nos aventuremos a cosas nuevas que rompan las reglas que alguna vez nos impusieron y que no están mal, pero que limitan. Los límites no me gustan demasiado, y realmente no creo que el realismo tenga límites, y de apoco nos daremos cuenta que todos los materiales convencionales y modernos, podrán ser combinados de la mejor manera, para lograr piezas realmente fantásticas, obras de arte únicas e irrepetibles.
Creo que el realismo ya puede ser dividido según los materiales que usemos y las técnicas, en realismo convencional y realismo vanguardista, y como no me gustan los extremos no me inclino más por ninguna de las dos corrientes, sino que trato de hacer realismo de todo tipo, las moscas convencionales con materiales simples sean estos sintéticos o naturales, atando todo, y las atrevidas moscas híper realistas en donde el atado es un 60 % y el resto es moldeado y pintado utilizando pinturas acrílicas he indelebles, lacas y porcelana fría. No cabe duda que estas últimas realistas son marcadamente diferentes tienen en su esencia la combinación justa de atado y escultura, y créanme que no es tarea fácil, requiere de un largo tiempo de diseño y dibujo, atado del esqueleto con las proporciones adecuadas, atado pata por pata logrando con una pluma de gallo las vellosidades, y posteriormente la colocación en partes del material moldeable de la forma justa, el moldeado, tarea muy compleja que requiere el uso de pinzas tijeras y agujas y principalmente paciencia y mucho tiempo, y finalmente la pintura, un punto fundamental, la fusión de los colores indelebles y su combinación con colores acrílicos y lacas.
Eso es un poco de lo que hago, anímense rompan con las metodologías, rompan con las reglas, los que no atan aún realistas empiecen hacerlo, y los que ya atan realistas, prueben cosas nuevas. Finalmente creo que si estas piezas vanguardistas actualmente no son consideradas moscas realistas, sino la escultura de un determinado insecto, puedo asegurarles que no voy a dejar de hacerlas por que las considero sumamente dificultosas, originales y principalmente muy divertidas.
Esta libélula que les presento aquí, es un trabajo complejo de varias horas, mi último trabajo no creo que sea considerado una mosca por qué no quise atarla sobre un anzuelo sino sobre un alambre. Tiene un gran grado de detalle, que fue logrado observando gran cantidad de fotos de odonatos en todos los ángulos y utilizando diferentes técnicas de atado realista y como mencione, combinando atado con moldeado una tarea larga. Espero les guste y disfruten de este trabajo.END
Autor: Sebastián Pagano.
Fotografías: Sebastian Pagano
Edición : Jorge Aguilar Rech